28/03/2012
Érase una vez un país donde ibas a un banco y te daban hipotecas para todo lo que quisieras: para la casa (que era una inversión segura), para el coche, para las vacaciones… Eran bancos amigos y cercanos que contaban historias de crecimiento infinito y que se ganaron la confianza de millones de Juan Pelanas. Como Juan Pelanas llegó a tener mucha confianza y amor por su banco le compró acciones y productos financieros de alta rentabilidad que le darían a su vez pingües beneficios a corto plazo.
Un día, se descubrió que algunos de estos productos financieros de alta rentabilidad estaban podridos, que eran inventados. El banco amigo había engañado a Juan Pelanas. Al destaparse el pastel, muchos Juan Pelanas perdieron su dinero y vieron que su casa iba bajando de precio (porque los bancos las habían inflado) mientras que su hipoteca seguía siendo igual de gorda y relumbrosa. Los bancos dejaron de ser tan amables porque tenían dinero que no era de verdad y le pidieron dinero de verdad al estado (dinero de verdad de los Juan Pelanas).
Entonces aparecieron en escena las agencias de rating, que calificaban a los bancos y a los países y les dieron muy mala nota a algunos, entre ellos, a España y sus bancos. También les dijeron a los países que debían acometer reformas estructurales para subir nota, porque si suspendían se irían al pozo de la mierda eterna. Los gobiernos, entre ellos, el de España fueron obedientes y acometieron algunas, pero no eran suficientes. Hasta que llegó Mariano y decidió hacer reformas de verdad, orientadas a flexibilizar el mercado laboral y dejar literalmente en pelotas la seguridad en el trabajo de millones de Juan Pelanas. Mientras tanto los grandes bancos seguían teniendo beneficios y forrándose.
Es la historia de un gran saqueo. Un saqueo a los Juan Pelanas que creyeron un día en el cuento del progreso infinito, y hoy se les quita el dinero, la casa y el trabajo. Políticos que trabajan para los mercados, para el señor feudal. ¿Y todavía te preguntas por qué una huelga general?
Nosotros le dedicamos este número a la huelga general, como muestra de apoyo y además lo hacemos con dos dibujantes nuevos, Toni Nievas y Chema Peral, que no se les ocurre hacer otra cosa que empezar a trabajar justo en el número de la huelga general ¿serán unos esquiroles?
Javihuelgas
Javirroyo
Javi Cejas
Sistema de Monos
La huelga debe ser indefinida. General, comarcal o regional, pero indefinida. Quienes manejamos sus máquinas debemos parar, porque ellos no lo van a hacer. Están bajando un puerto de primera en punto muerto y en línea recta, arrasando toooodo a su paso. Y no se estrellarán, joder!!
Encima nos van a impedir quejarnos mientras nos atropellan. Así es, como esos dos policías borrachos que han atropellado y asesinado a la vez a una ciclista en Mallorca. www.publico.es/espana/427201/dos-policias-nacionales-atropellan-a-una-ciclista-y-se-dan-a-la-fuga
Ésta es La Ley que nos aconseja no hacer huelga, no parar, no gritar, como en las películas cuando el secuestrador está dando de hostias a la chica y le dice «¡¡No chilles, puta!! ¡¡Si chillas te pego más fuerte!!». Y da igual, porque al final le pega más fuerte.
Hay que parar las fábricas y decir que dejen de darnos galletas. No nos gustan sus galletas, no están dulces. Tampoco nos gustan cómo se las gastan en fábricas de galletas como ésta: jangas.wordpress.com/2012/03/23/29m-trabajar-mejor-y-mas-grupo-siro-a-sus-trabajadores
Con los buenos ratos que he pasado yo en Venta de Baños… Con lo bien que olía el pueblo… Ahora ya sabemos qué tipos de galletas hacen ahí dentro.
Hartitos de lo de «por encima de nuestras posibilidades». Sí, nosotros en vez de comprar una barra de pan comprábamos dos. Ahora ya no podemos comprar ni media barra. Ni siquiera un currusquillo. En realidad lo que nos está pasando es que somos gobernados por personas que tienen responsabilidades por encima de sus posibilidades y su capacidad moral e intelectual.
Es recomendable saber de qué va la reforma laboral. Aquí lo explican: madrid.tomalaplaza.net/files/2012/03/IMPLICACIONES-DE-LA-REFORMA-LABORAL-GTEconomiaSol.pdf
Y ya que esto va de dibujos y el tema es ‘La huelga general’, pues vamos a unirlo todo junto y a acompañarlo de una canción. En 1990 La Polla Records sacó un disco experimental: «Los jubilados». El libreto interior lo ilustró Azagra. Uno de los temas se titula «Huelga general».
Aquí la canción: grooveshark.com/s/Huelga+General/2GMwy6?src=5
Aquí el dibujo: 3.bp.blogspot.com/_MSsiewUzxVk/SZ3KVfPeFgI/AAAAAAAAI9g/NMi41BIwhNA/s1600/lpr10.jpg
Toni Nievas
http://www.flickr.com/photos/toninievas/
http://toninievas.lacoctelera.net/
Xavier Àgueda
Tamayo
Secretario General bebió con desgana de la copa que le tendía el hombre de la barba. No era, ni de lejos, el mejor champagne que había probado pero fingió que le gustaba. En la mesa del hombre de la barba, que acababa de encender un puro mediocre, estaban los periódicos del día. Secretario General guardaba una distancia prudente con su interlocutor para no ser salpicado por la saliva que saltaba en todas direcciones cada vez que el hombre de barba hablaba. El salivillas, le llamaban a sus espaldas. Los titulares, algunos con más saña que otros, recogían el pobre resultado de la huelga general y ellos celebraban el fracaso. A veces, Secretario General se sentía profundamente cansado de la doble vida que llevaba. A la luz de los focos, un discurso. A la luz de las lámparas de diseño de los despachos secretos, otro discurso. Pero merecía la pena. Su papel era imprescindible, él lo sabía. Los demás también lo sabían y le recompensaban en su justa medida. Además, su brillantez seguía alumbrando ideas geniales como subcontratar con una empresa la pegada de carteles convocando a la huelga.
Miró su impecable reloj de muñeca y suspiró con alivio. Pronto podría largarse de allí y visitar los despachos en los que se servía champagne de verdad y no ese horrible zumo de uva con gas que le ofrecía el desagradable hombre de la barba.
Federico Montalbán
Toni Nievas
Cristina Spanò
Adão Iturrusgarai
Toni Nievas
Huelga General
He visto esta mañana un hombre con los brazos cruzados enfrente la puerta de una tienda de fotografía. Jersey gastado, sonrisa triste. Ya nadie hace fotos para ser reveladas. Daguerre se llama la tienda, daguerrotipo, pienso en voz alta. Y se me aparece una fábrica de nombres para propietarios de tiendas de fotos con los cristales de las ventanas rotos. La certeza de las cosas viejas no cabe estos días. Sin atreverse a salir, la mujer de la carnicería mira hacía la calle con ojos ausentes. Ahí fuera el calor parece más intenso que en el aciago frío industrial. Se vende, se alquila, se traspasa. Rótulos para un país abandonado. Colas en el médico, igual que las del supermercado. No tengo tiempo, óigame. Las gitanas ya no venden ajos, ahora revuelven la basura en los contenedores de reciclaje. En la universidad enseñan a los estudiantes a pagar mejor. Mi hermano en Varsovia. Y tú, ya no me quieres soñadora, me quieres atada a un árbol.
Montse Virgili
Sergi Padró
Tute
Diego Burdío
Pau Anglada
Toni Nievas
Fran Collado
Tyto Alba
Toni Nievas
Chema Peral
Paula Suárez
Pau Anglada
La Pintada
La huelga general era crucial, insistieron en la reunión del sindicato a la que no acudí por ayudar a mi antiguo patrón a repasar unas cosas. Un trabajillo de una tarde para empujar la prestación con unos billetes y no desconectarme, claro, por si cae algo. Qué fastidio perdérmela, cuando llegué a la sede todos andaban en ebullición, contaban chistes sobre Arenas y la reforma laboral mezclados con casos de despidos que me revolvían el estómago. Ayudé, como siempre, a cargar las pancartas, repartir insignias y pegatinas, gorras y pañuelos. Arriba y abajo. El maletero de mi coche a rebosar. Después vino la manifestación, qué pasada. Todo cerrado. No creo lo que dicen los del gobierno sobre los piquetes. Yo no participé, ojo, pero porque a mi mujer le da miedo, vaya que me pase algo. Es una miedosa, como aquella vez que le dije que íbamos a hacer huelga de brazos caídos.
La cosa no ha ido mal del todo, ha pasado menos de un mes y ya estoy trabajando, la inversión pública en empleo que reclamábamos el 29-M ha dado sus frutos. Ahora me dirijo a limpiar las pintadas que quedaron tras la huelga. Lamentaré tener que borrar algunas muy chulas que hicimos, porque la primera fachada que me toca es la de la tienda de compraventa de oro de la calle principal.
Juanfran Molina
Gallardo
Sistema de Monos
Lola
Toni Nievas
Pau Anglada
Toni Nievas
Javirroyo
Toni Nievas
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[…] Una tira tragicómica para El Estafador 118: Huelga General. […]
Yo esta semana no participo porque estoy en huelga. (#excusascutres)
Doloroso, pero muy bueno. Adoro cuando se ponen agridulces. Saludos desde México.
¿No os parece que cada dibujante debería tener una sóla tira? Aunque esté bien lo del Toni y tal, creo que se pasa.
Lo suyo sería haber hecho las tiras sobre la huelga la semana anterior para informar (o lo que sea) y esta semana haber hecho huelga. Digo yo.
Fresquito, ¿menos es más?
Pobre, insulso, neutral, ñoño…